Ir a Castillo del Romeral, en el sur de Gran Canaria, y no encontrar viento sería de lo más anómalo. Así que cumplimos con la norma y realizamos esta entrevista al Patrón Mayor de la Cofradía de Pescadores de esta localidad tratando de no salir volando. Bien es cierto que a Álvaro Déniz costaría trabajo, ya que se nota su anterior afición como puntal de Lucha Canaria. Pero todo lo que tiene de grande, lo tiene de cercano y de buena persona, aspectos que seguro que apreciarán en la conversación.
Montse Gimeno, nuestra gerente, arrancó la entrevista preguntándole por el sector pesquero de Castillo del Romeral, y Déniz sacó pecho, presumiendo de sector joven, con una media de edad de 30 años, a pesar de ser un trabajo sufrido. Según nos cuenta, el 90% de los barcos de esta cofradía son naseros y capturan siempre dentro de las especies permitidas. La mayor parte de la flota son falúas de 8 metros aproximadamente, según nos comenta.
Cuando le preguntamos por el papel de la cofradía, el patrón mayor lo tiene claro: su labor es velar por el marinero y apoyar el sector. Eso se traduce en mejorar y ampliar la franja de horarios de servicios que ofrecen a los pescadores. En cuanto a la primera venta, Déniz comenta que la mayoría de los pescadores ya trabajan con una serie de arrieros concretos que le compran el pescado según llega a puerto, aunque están trabajando en la opción de montar una pescadería de venta directa.
Imposible no hablar del furtivismo y en este caso, aunque Déniz indica que hay poca incidencia en Castillo del Romeral, reconoce que es una práctica que perjudica a los pescadores profesionales. Cuando profundizamos en los retos a los que se enfrentan en el sector, el primer comentario va por la normativa, que consideran cada vez más restrictiva y que les perjudica a la hora de sacar rendimiento de su trabajo.
Acabamos la entrevista preguntándole si animaría a la gente joven a meterse en este sector y Déniz lo tiene claro, él mismo es el ejemplo. No viene del mundo de la pesca y un día salió a pescar invitado por un familiar y le gustó tanto que lo ha convertido en su profesión. «Se puede vivir de la pesca, pero hay que trabajar mucho», afirma. Y añade que si te gusta, disfrutarás mucho de tu trabajo. «Hay días que libro y que me voy a pescar», concluye.
No te pierdas la entrevista completa en el siguiente vídeo:
