El despacho de Miguel Hidalgo Sánchez, Consejero de Área de Sector Primario y Soberanía Alimentaria del Cabildo de Gran Canaria, no deja de ser un despacho institucional. Pero en este caso, la cercanía la pone el entrevistado, que nos recibe haciendo un hueco en su apretada agenda para responder nuestras preguntas sobre la costa isleña.
Y hablamos de cercanía porque ya en la primera pregunta, Hidalgo lo deja bastante claro: «Hemos hecho de la costa un vertedero». Sin embargo, después de esta contundente frase añade un poco de optimismo: «Si conseguimos cambiar esa tendencia, podríamos tener un futuro esperanzador y eso depende exclusivamente de los que vivimos en esta tierra».
Hidalgo reconoce que su puesto actual en el Cabildo le ha dado la oportunidad de descubrir un mundo nuevo al relacionarse más con el sector costero. «He podido conocer a muchas personas del mar y de la costa con mucha generosidad, implicación y formación que me han sorprendido. Y con un nivel de organización que no siempre se da en otros ámbitos del sector primario. Las cooperativas y las cofradías tienen un nivel de organización ejemplares».
Se muestra rotundo con lo que hay que hacer en la costa grancanaria: «Lo primero que tenemos que hacer es respetarla, crear la conciencia de que no es un vertedero y de que no tenemos que edificar o estar en primera línea para disfrutar del mar. Tenemos una experiencia amplia y larga en el tiempo sobre nuestras actuaciones en la costa y estamos a tiempo de corregirlas y proponer soluciones sostenibles en el tiempo y respetuosas con el espacio».
Cuando le preguntamos por las futuras acciones del Cabildo de Gran Canaria para mejorar este sector, además de potenciar el Grupo de Acción Costera de Gran Canaria como instrumento importante para dinamizar el sector y los espacios, Hidalgo hace hincapié en la creación de la Mesa de la Pesca y la Acuicultura. «La hemos creado para escuchar y estar cercanos al sector, no sólo en las reivindicaciones a nivel insular, sino también en aquellas acciones que se hacen fuera de nuestra tierra como las cuotas de atún rojo o las normativas que se sacan en relación a las artes de pesca que afectan a los pescadores de la Isla. Crear líneas de apoyo económico», añade.
Como conclusión, nos quedamos con la intención de estar más cerca de las personas que trabajan en la costa: «Lo importante es la proximidad, estar con ellos, oírles, escucharles e intentar compartir sus inquietudes y buscar soluciones conjuntas».